Las TIC como herramientas para la enseñanza son relativamente nuevas, son muy buenas, facilitan el trabajo del docente, evitan la elaboración y acumulación de láminas a veces sin sentido para el alumno. El alumno por su parte puede acceder de forma rápida a temas que solo podía consultar en libros y que a veces se les dificulta conseguir y además puede realizar actividades interactivas e ilustrativas más acorde a sus interés y edad.
Desafortunadamente, las TIC no son accesibles para todos, en la mayoría de las escuelas no se cuentan con computadoras para todos y mucho menos con internet. Esta situación dificulta su uso y además resulta costoso ya que tanto maestros como alumnos tienen que acudir a centros que ofrecen el servicio de internet.
Es indispensable que esta tecnología sea llevada a todas las instituciones educativas sin excepción y así la educación se encuentre realmente a la vanguardia y no se estanque en el pasado.
La innovación educativa en la cuestión de las TIC es buena aunque un poco lenta mientras los avances en esta rama cada día son más complejos, en las escuelas no han terminado de equipar ni se tiene el dominio más idóneo de estas tecnologías.
En conclusión, considero que las TIC como herramientas para la enseñanza de la historia es una buena metodología aunque no todos tengamos acceso a ellas, y pese a esta situación se hará todo lo posible por llevarla a las aulas escolares, se buscaran los medios para lograrlo.
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